" En estos días en que recorremos los templos de Sevilla visitando los belenes instalados por las diferentes hermandades y cofradías de la ciudad nos hemos encontrado en la Capilla del Museo con un detalle que quizás pase desapercibido para muchas personas. Como sabrán la imagen del Cristo de la Expiración se encuentra en proceso de restauración y para significar la ausencia del hijo, su madre la Virgen de las Aguas porta en su mano una de las potencias que lleva el crucificado expirante sobre su divina cabeza. Un bonito detalle, aunque el hijo falta, siempre está presente en el recuerdo de sus cofrades."