Es tradición en la ciudad gaditana de Jerez de la Frontera que la inmensa mayoría de los besamanos y besapiés dedicados para dar culto a sus cristos y vírgenes de las diferentes cofradías y hermandades jerezanas se celebren en los domingos de cuaresma. Este último domingo de marzo, preámbulo de la semana mayor que se avecina en el calendario nos hemos desplazado hasta allí para disfrutar de los bellos altares y pasos que ya se encuentran montados esperando la llegada del día señalado para su salida procesional.
En esta primera
entrega les mostramos los besamanos instalados por la Hermandad de los Judíos
de San Mateo, con Nuestro Padre y Señor de las Penas, obra atribuida al
escultor sevillano Ignacio López y bendecida en 1714 y María Santísima del
Desconsuelo, obra también atribuida al mismo autor en 1713. La virgen lucia el
manto recientemente restaurado por Juan Ramón Paleteiro y que era el antiguo de
la Amargura de Sevilla obra de Juan Manuel Rodríguez Ojeda en 1905.
La Hermandad del Transporte ubicada en la Basílica de la
Merced tenia a su dolorosa titular Madre de Dios de la Misericordia en
veneración, esta imagen es obra de Sebastián Santos en 1956.
La Hermandad del Prendimiento sita en la iglesia parroquial
de Santiago tenia en besapiés a su titular Nuestro Padre Jesús del
Prendimiento, el conocido popularmente por “El Prendi”, obra atribuida a Luisa
Roldán “La Roldana” a finales del siglo XVII.
El paso de palio de María Santísima del Desamparo se
encontraba terminado de montar, en dicho paso destacan el conjunto de bordados
del palio y manto obras del taller de Esperanza Elena Caro entre los años 1949
y 1964 y que están inspirados en el desparecido palio rojo de la Macarena de
Juan Manuel Rodríguez Ojeda.