jueves, 13 de febrero de 2014

“ La diferencia está en sus manos”.

En Sevilla es costumbre realizar altares singulares para los diferentes cultos ya sean triduos, quinarios o novenas de las distintas hermandades y cofradías. También es destacable cuando se realizan los besamanos y besapiés de las imágenes titulares que se busque algo diferente. Aquí lo que llama la atención es justo lo contrario, entre el altar del triduo de María Santísima de la Angustia de la Hermandad de los Estudiantes de Sevilla y su besamanos podemos decir que la única diferencia entre ambos se encuentra en las manos de la Virgen. La mano derecha ha cambiado la postura para ser besada y el pañuelo de la virgen ha cambiado a la mano izquierda.