En la madrugada del 25 de julio, en la sevillana población de Castilleja de la Cuesta, la Hermandad Sacramental de Santiago organiza uno de los cultos externos más llenos de tipismos de la localidad. A las 4 de la noche, como colofón al último día de la Gran Velada que se celebra en la Plaza de la localidad y previo a la salida procesional del Patrón del pueblo en la tarde de dicho día, parte de la iglesia parroquial de Santiago, el Simpecado con la imagen mariana de la corporación, Nuestra Señora de la Soledad, portado por los hermanos. Abre el cortejo una cruz dieciochesca de espejos y un largo cortejo de hermanas ataviadas con el traje típico de la tierra con unos curiosos faroles rojos y blancos.
Durante el acto se rezan los misterios del rosario por las calles y son cantados por el coro femenino de la Hermandad. Además, entre uno y otro misterio canta el centenario coro de campanilleros de hombres de la hermandad, con coplas antiquísimas dignas de ser oídas.
Texto y Fotos: Manuel P. Rodríguez Rodríguez.