A la localidad de Alcalá de Guadaira se la conocía antiguamente como “Alcalá de los panaderos” debido a que una gran parte de la población trabajaba en este sector no solamente fabricando pan, sino transportándolo y comercializándolo en la ciudad de Sevilla. Justa fama llegó a alcanzar el pan de Alcalá en sus múltiples formas y variedades, roscas, picaos, teleras etc
Esa tradición panificadora se manifiesta de manera clara cuando llega la celebración del Corpus Christi, el cuerpo de Cristo simbólicamente en forma de pan es de lo más sugerente para realizar diferentes tipos de adornos y complementar los exornos florales.