La hermandad del Santísimo Cristo de Burgos conmemora en el presente año los 475 años de la realización de su crucificado titular y por tal motivo en la celebración de su anual quinario, la priostía ha realizado un sencillo altar pero que está lleno de significado porque la imagen se encuentran dispuesta en su paso procesional, obra del tallista José Merino Román en 1939 y además en su estado primitivo pues se encuentra iluminado por cuatro faroles que corresponden a su composición original y hasta el año 1944 estuvieron iluminando en el paso al crucificado de Juan Bautista Vázquez “El viejo”. En la actualidad el paso se alumbra con cuatro hachones, pero estos faroles continúan con su función pues la hermandad del Santísimo Cristo de la Sangre de la localidad onubense de Zalamea la Real los compró para usarlos en el paso procesional de su titular cristífero.