En uno de los viajes veraniegos de nuestros colaboradores nos hemos encontrado una de esas cosas que te dejan la boca abierta.
Situémonos.
Viaje típico por Galicia recorriendo la famosísima Costa da Morte y se para una pareja de sevillanos en la bellísima localidad de Concurbión situada en el Cabo de Cee a pocos kilómetros del Cabo de Finisterre (Fisterra).
Resultaba atractiva la parada porque estaban celebrando un mercado medieval, parecidos a los que organiza la Hermandad del Sol o al Mercado Barroco que se hace en Olivares.
La ciudad es pequeña pero muy bella, con unas fachadas petreas muy llamativas y con unos balcones remozados y artísticos. Les llamó la atención la Iglesia de San Marcos de estilo gótico marinero (así lo describía en el triptico informativo). Consideraron que podía ser un sitio adecuado para almorzar y así lo hacen en un velador del paseo marítimo a pocos metros del Puerto.
Terminan de almorzar y al levantarse se quedan helados mirando el interior de un cierre donde en la pared de la casa, dentro del balcón aparece, afortunadamente sin ser tapado por los visillos, un azulejo cerámico de la Esperanza Macarena de pequeño tamaño y enmarcado en forja para ser colgado. El nómbre de Cerámica Santa Ana se podía leer a simple vista.
Y con estas fotos donde está señalado el sitio concreto de la casa donde está el azulejo termina esta anécdota que esperemos le sirva a quién vaya a visitar Galicia y quiera ver algo totalmente sevillano.
